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Seris, el pueblo que se resistió a la evangelización en Sonora

A esta comunidad de descendencia ancestral en Sonora, se le conoce como seris, que proviene de la lengua yaqui y significa «hombres de la arena». Sin embargo, suelen llamarse a sí mismos Konkaak o comca’ac, que en su lengua quiere decir «la gente». 

En la actualidad habitan en dos localidades de la costa desértica del estado: Desemboque, municipio de Pitiquito y, Punta Chueca, perteneciente al municipio de Hermosillo. Pero se van adaptando, de acuerdo con los ciclos de pesca.

Así que cada periódo pueden radicar en diversos campos pesqueros, los cuales están distribuidos a lo largo de aproximadamente 100 kilómetros de litoral. Entonces su territorio se integra por una parte continental y por la isla de Tiburón.

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¿Cuáles son los ritos de los seris?

Con la llegada de los evangelizadores, después de la conquista de México, los seris jamás permitieron la imposición de la religión católica, gracias a esta osadía, actualmente  continúan con su cosmogonía ancestral.

Su sistema de gobierno-religioso-festivo no es para nada complejo, de hecho, su interpretación del mundo, ritos, fiestas y otras manifestaciones culturales, poseen un vínculo fuerte con la naturaleza, los aspectos biológicos y sociales de la reproducción del grupo.

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Al no ser evangelizados formalmente, los ritos de los seris se vinculan con el nacimiento, el inicio de la pubertad y la muerte. Cada canción que interpretan gira alrededor del mar y su fauna marina, sin olvidar las antiguas hazañas de héroes y guerreros.

Por lo tanto, carecen de los principales elementos católicos que se pueden observar en otros grupos indígenas. Además mantienen su lengua y sus prácticas ancestrales, que dan la bienvenida a ritos como el inicio del año nuevo seri, en Sonora.