Descubre el origen y significado de la leyenda de La Llorona, desde sus raíces mesoamericanas hasta su impacto en la cultura popular mexicana y latinoamericana.
“¡Ay, mis hijos!”. Si alguna vez has escuchado este lamento en la oscuridad de la noche, aunque sea en una leyenda contada al calor de una fogata o susurrada por algún familiar mayor, probablemente conoces la historia de La Llorona, uno de los mitos más poderosos, antiguos y persistentes de nuestra cultura mexicana.
Lejos de ser solo una figura del folclore popular o un recurso para asustar niños, La Llorona es un símbolo profundo, con raíces que se hunden en la cosmovisión mesoamericana y que ha evolucionado durante siglos hasta convertirse en una manifestación viva del duelo, la maternidad, la culpa y la resistencia cultural.
En su llanto resuenan las voces de los pueblos originarios, las heridas de la Conquista y las emociones que aún, generación tras generación, conmueven a quienes la escuchan.
Asquee te invitamos a que a este viaje por los orígenes ancestrales de La Llorona. Más allá del miedo, descubrirás el poder simbólico de esta leyenda que sigue viva… y que todavía, en muchos rincones del país, se cuenta con el mismo respeto, temor y fascinación
La figura de La Llorona conecta con deidades del mundo mesoamericano.
En el Códice Florentino, se describe a Cihuacóatl, una diosa ancestral que, vestida de blanco, lamentaba la pérdida de sus hijos y el destino de su pueblo, presagiando catástrofes.
También se han relacionado con esta leyenda personajes como Xtabay (maya) y Auicanime (purépecha), que comparten temáticas de seducción, pérdida y muerte.
Durante la Nueva España, esta figura se transformó. Tomas símbolos prehispánicos, como el cabello suelto, el vestido blanco y el lamento “¡Ay, mis hijos!”, y los adaptó al contexto de la conquista, expandiéndose como advertencia para la población y reflejo de una cultura subyugada.
Existen tres vertientes principales sobre su origen.
La imagen recurrente incluye una mujer vestida de blanco, lamentos nocturnos junto al agua y una figura espectral que evoca advertencia, dolor y justicia.
Su figura se mantiene arraigada en México como parte del Patrimonio Cultural Intangible y ha arribado a la cultura popular en sitios tan diversos como el cine y la literatura.
Películas como The Curse of La Llorona (2019) la reinterpretan con tintes de horror contemporáneo, regresando al espectador el eco de la leyenda ancestral.
Porque La Llorona no solo asusta; interpela. Es un eco de la maternidad transgredida, del duelo cultural, de la memoria histórica y del sincretismo entre cosmovisiones.
Su figura invita a reflexionar sobre lo femenino, lo colonial y lo espiritual, y se mantiene viva justamente por su capacidad de trasformarse sin perder su esencia.
La leyenda de La Llorona es un relato atemporal que trasciende épocas y geografías, desde los mitos prehispánicos hasta versiones modernas.