La imagen de una cigüeña sobrevolando ciudades con un pañal en el pico en el que duerme plácidamente un bebé, ha estado muy presente en la cultura popular, especialmente a todo aquello inherente a la maternidad. No es extraño el observar adornos para baby shower, tarjetas, recuerdos, hasta postres y pasteles con la caricatura de la cigüeña mensajera que carga con tan preciado regalo para los padres.
En la película animada Dumbo de Walt Disney, se puede notar que esta ave también entrega sus crías a los animales, volviéndose un ícono de la maternidad. Pero ¿de dónde surgió este mito? Te contamos la historia.
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Historia
La cigüeña es un ave que tiene un gran significado para la cultura occidental, especialmente para los romanos quien consideraban que estas aves eran sagradas y que representaban a la fertilidad, la felicidad, las mujeres embarazadas, los recién nacidos y por supuesto la maternidad, esto debido al cuidado y esmero que ponen estas aves en cuidar a sus polluelos; desde que ponen sus nidos, hasta que estos están listos para salir de él.
También están relacionadas con la primavera y los días cálidos, por lo que puede simbolizar con la fertilidad y vida que trae consigo esta estación en la que todo reverdece y la natalidad aumenta.
¿Por qué de París?
Las cigüeñas siempre regresa al mismo lugar para tener a sus crías y cuidarlas, por lo que se cuenta que una pareja de cigüeñas anidó en la chimenea de una casa en la que vivía un joven matrimonio. Cuando las cigüeñas volvieron en la siguiente primavera, la pareja tuvo a su primer hijo por lo que bromearon que «lo habían traído la cigüeñas» todo esto sucedió en una región cercana a París.
El mito comenzó a extenderse y empezó a ser respuesta de los padres ruborizados cuando los niños preguntaban de dónde nacen los bebés.
