En Huamantla, Tlaxcala, existe otra tradición de hacer tapetes con aserrín y tierra de colores. Estos tapetes y alfombras fueron declarados en 2013, por el gobierno de Tlaxcala, como Patrimonio Cultural Inmaterial de la entidad.
Los expertos y estudiosos del tema señalan que los tapetes de Huamantla tiene su origen en una hermosa tradición floral: los antiguos tlaxcaltecas adoraban con una literal lluvia de pétalos florales a la diosa de la fertilidad Xochiquetzali. También preparaban caminos y ornamentos con enramadas vegetales para otras deidades prehispánicas.
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Después, con la llegada de la época de la Colonia, este culto cambió para convertirse en una ofrenda a la Virgen de la Asunción para dar gracias o como muestra de fe hacia la patrona de Huamantla.
Ahora Huamantla rompió el récord Guiness del tapete de acerrín más grande del mundo tras confeccionar una alfombra de 3 mil 932 metros continuos.
Alrededor de 240 artesanos participaron en la creación de seis kilómetros de acerrín, por lo que la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros indicó que las acciones son una muestra del trabajo de los habitantes de la comunidad.
“Estoy muy feliz y muy agradecida Tlaxcala, gracias por darme la oportunidad de ser su gobernadora y porque vamos a seguir trabajando para que Tlaxcala sea reconocido en el mundo”.
El diseño fue preaprobado por el diseño de Guiness World Records, destacando un diseño propio de Tlaxcala con figuras e imágenes oriundas de la región.
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