La actual Veracruz guarda joyas como la Casa de Cortés, quien edificó su residencia en La Antigua, nombre actual del municipio de la entonces Villa Rica de la Vera Cruz.

El llamado conquistador español, quien sometió al Imperio mexica, dio pie a la fundación de la Nueva España. En 1525 la Villa Rica de la Vera Cruz se trasladó al lugar conocido hoy como La Antigua; permaneció allí hasta 1600, cuando se asentó en el lugar que ocupa en la actualidad, y al lugar casi abandonado donde se había asentado se le llamó La Antigua, para diferenciarla de la Nueva Veracruz.

La Casa de Cortés abre sus puertas

La Casa de Cortés es una pequeña construcción de un piso en la cual destacan enormes ventanales y un gran número de habitaciones alrededor de un patio central. Expertos señalan que probablemente fue la primera casa de Cortés; incluso, aseguran que la construcción de grandes ventanales era su dormitorio.

El acceso a la antigua Casa de Cortés es gratuito, pero también es posible contratar algún tour guiado para que la experiencia sea mejor y conozcas un poco más de la historia y leyendas que rodean a este lugar.

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Legado del hombre y la naturaleza

La Casa de Cortés fue edificada por habitantes de los pueblos totonacas; ellos utilizaron piedra volcánica, tabique, coral, baba de nopal, ostión y caracol, además de concha de mar, cal calcinada y miel.

Se localiza a un costado de la Parroquia del pueblo y a primera vista es fácil de distinguir gracias a su rústica fachada. En la actualidad, está cubierta por raíces y una espesa vegetación, que poco a poco se apoderaron del espacio para darle un toque singular a la antigua construcción.

Pese al deterioro de la fachada, tanto la noria como el horno de pan parecieran estar intactos. En general, la Casa de Cortés sigue conservando su arquitectura española andaluza.

De acuerdo con los guías, la vegetación de la casa se debe a la acción de los huracanes: los fuertes vientos y las impresionantes tormentas recubrieron la casa con tierra y algunas aves sembraron semillas de amates que terminaron por germinar.

Otro de los grandes atractivos de la Casa de Cortés es el cañón que se encontró a orillas del río Huitzilapan, el cual no tiene relación alguna con Hernán Cortés, pero cuenta con una antigüedad de casi 500 años. Tras diversas investigaciones, aún no se ha podido aclarar el origen y función de esta edificación.

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Hoy se emplea para celebrar fiestas de XV años, bodas y demás actividades de tipo social. Al visitar la Casa de Cortés, no olviden visitar el árbol de la ceiba, el cual tiene más de 500 años de edad.

Aquí también es posible realizar un recorrido en lancha por el río y disfrutar de sus paisajes, así como degustar de unos ricos mariscos que venden en cualquiera de los restaurantes circundantes en la ribera del río.

• ¿Dónde? Venustiano Carranza, Centro, CP 91687, Veracruz.
• Horario: de lunes a domingo de 08:30 a 16:30 horas.
• Contacto: 296 962 0300.