grutas del rosario, el fenómeno en el pueblo mágico de mapimí

Grutas del Rosario, el fenómeno caprichoso de Mapimí

Desde el corazón del Pueblo Mágico de Mapimí hay que recorrer 22 kilómetros para llegar a la entrada de las Grutas del Rosario, únicas en su tipo porque albergan una serie de formaciones que sólo se desarrollan horizontalmente en sus techos, un fenómeno que no ocurre en otra cueva en México.

Fueron descubiertas por la curiosidad de dos mineros en 1966. Mientras extraían fosforita de las minas localizadas en la Sierra del Rosario, en Durango, Simón Agüero Espinoza escuchó un sonido hueco que llamó su atención, así que él y Benito Díaz Frayre comenzaron la expedición.

Primero observaron que salía vapor caliente, entonces quitaron un par de piedras del camino, movimiento que sólo dejó ver una cavidad. ¡Pero querían saber más! En compañía de otros compañeros, lograron ingresar al lugar que bautizaron como Cueva de la Lágrima, porque en cualquier punto que pisaban, el agua corría.

Tour por las Grutas del Rosario

Gracias a estos intrépidos hombres, ahora los turistas y viajeros pueden acceder y recorrer fácilmente sus entrañas. En su interior hacen acto de presencia las estalagmitas y estalactitas, clásicas en este tipo de excursiones; la diferencia es que cada una muestra lo que la mente humana es capaz de recrear.

En su conjunto, ofrecen una presencia insólita, digna de admirar durante un recorrido de 500 metros, que va dejando al descubierto sus cuatro niveles, con una altura aproximada de seis metros. Además, cuenta con salones y un cuerpo de agua con diferentes profundidades, otorgando a la vista un escenario abrumadoramente fascinante.  

Te puede interesar: Centro Ecoturístico El Bayo, una macrorruta a explorar en la Sierra de Durango

Durante la travesía van surgiendo figuras que simulan castillos, duendes, piano, iglesias, arpas y mucho más. Estas formaciones surgen con el paso del tiempo, cuando la disolución y la acumulación de las sales del agua van esculpiendo a su antojo.

Así que se pueden admirar obras de arte en colores blanco, castaño y rojizo, tonos que dependen de las impurezas minerales disueltas en el agua que corre. De acuerdo con los expertos, se cree que las Grutas del Rosario tiene su origen hace 134 millones de años, con la pasada glaciación.

Te puede interesar: La Zona del Silencio, el gran misterio de Durango