«Teporocho» es un término muy común en México y es posible que todos alguna vez hayamos escuchado esta palabra con la que se suele describir a una persona alcohólica indigente. A continuación te daremos un poco más de contexto sobre el origen de este mexicanismo.

¿Cómo nació la palabra «teporocho»?

Este término surgió en la CDMX, para ser exactos en el mercado de la Merced, ya que aquí se vendía un remedio para la resaca o cruda; esta consistía en una infusión hecha a base de té de canela y naranja, a la que le añadían «piquete», principalmente aguardiente para atraer a aquellos que gustaban de excederse de tragos durante la noche.

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Esta idea era sin duda una minita de oro, inicialmente se vendían los tés a 10 centavos, precio que para aquel entonces era sumamente caro, por lo que una señora decidió copiar la idea y competirle directamente al puesto original pero a un menor costo, dándolos a 8 centavos, con el fin de acaparar clientela, motivo por el cual colocó un letrero con la leyenda: «Té por ocho«.

Pronto los borrachos comenzaron a correr el rumor y el nuevo puesto cobró fama y popularidad, atrayendo a numerosos borrachitos que se decían entre sí «vamos por el té por ocho«, fue así como surgió este término que con el paso del tiempo se volvió un mexicanismo.

Significado en México

Como ya se explicó, la palabra «teporocho» surgió en México, pero su significado en el país cobró mayor popularidad en la década de los 70, cuando se estrenó la cinta mexicana «Chin Chin el Teporocho«, basada en la novela de Armando Ramírez, que narraba la vida de un adicto a la «teporocha».

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Tanto la bebida como la cinta, terminaron por convertir la palabra «teporocho» en un adjetivo que las personas emplean comúnmente y de forma despectiva para referirse a los borrachos que deambulan por las calles con botella en mano.

Dulce de teporocho

Esta es una golosina de leche en forma de almohaditas esponjosas con sabor a ron, mantequilla, rompope, tequila, capuchino, canela y whisky cremoso.