Monterrey cuenta con una gran cantidad de cerros a su alrededor, los cuales fungen como guardianes silenciosos que resguardan la ciudad, adornando de forma majestuosa el paisaje neolonés, entre los que destacan el Cerro de la Silla y el Cerro de las Mitras, entre otros.
El Cerro de las Mitras forma parte de la Sierra Madre Oriental y cuenta con una altitud de más de 2 mil metros sobre el nivel del mar. Su nombre refiere a la forma que tiene desde diferentes perspectivas (Mitra). Mitra es el tocado que recubre la cabeza de las autoridades católicas.
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Su nombre se le adjudica a Alberto del Canto, uno de los fundadores de la capital de Nuevo León, y se ubica en el poniente de la zona metropolitana de Monterrey, entre los municipios de Santa Catarina y García.
El Cerro de las Mitras alberga diferentes ecosistemas y funge como hogar de una gran variedad de especies de flora y fauna, como encinos, helechos, agaves, palmas, biznagas, nopaleras, pitaya, entre otras, así como víboras de cascabel, zorrillo, águilas, ardillas, coyotes, búhos, águilas, halcones, entre otras.
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Cerro de las Mitras, un gigante de 15 picos
Está conformado por 15 picos, cuyos nombres son: siete de ellos reciben el nombre de «Brujas«, además de los de Cuauhtémoc (el más alto con 2 mil 500 mts), Piñón, Pirámide, Perico, Piloto, Lobos, Alfa y uno más que no tiene nombre.
Llegar hasta la cima requiere poco más de una hora y pone a prueba la resistencia y condición física de quien lo visita, además es un tanto complejo de escalar ya que en algunas zonas su inclinación es bastante, pero una vez arriba la recompensa será espectacular gracias a sus increíbles vistas panorámicas de Monterrey.