México es un país en los que la magia, las leyendas y el misticismo están muy arraigados en nuestra cultura. Hoy toca el turno de hablar de los nahuales, criaturas fantásticas que han aterrorizado los pueblos de México.

Se dice que los nahuales existen desde tiempos prehispánicos y diversos pueblos como los mexicas y los mayas – el cual es conocido como Huay –  hablaban de ellos.

Se dice que los nahuales son los espíritus de las brujas o hechiceros transformados en animales –  perros, gatos, lobos, cerdos, águilas, chivos, toros, etcétera – y que salen por las noches para realizar hechizos, robar animales, visitar a personas importantes, o cobrar antiguas  venganzas.  Dicen quienes los han visto – o aseguran haberlo hecho- que son animales extremadamente grandes y  generalmente de color negro, al cruzarse con ellos causan un verdadero terror y muchos de ellos buscan atacar a quienes se crucen en su camino. También hay otras versiones en la que los nahuales son animales con rasgos humanoides haciendo aún más tétrica su apariencia.

Se cuenta que quienes se han topado con los nahuales  han intentado defenderse de los ataques con armas de fuego, palos o machetes, algunas veces consiguen herirlos y al poco tiempo se dan cuenta con pavor que alguna persona que conocían presentan la misma herida en la misma parte en la que se le hizo al nahual.
Se dice que para matar a los nahuales se debe de hacer con armas «curadas» – preparados mediante rituales con oraciones y agua bendita – y que después de haber sido ejecutados tomarán su forma humana al salir los primeros rayos del sol.

Las historias de nahuales se han contado de generación y generación a lo largo y ancho del país.