En el corazón de la Ciudad de México, a solo unos pasos del bullicio del Zócalo capitalino, se encuentra un tesoro histórico que ha despertado el interés de propios y extraños: Manzanares 25.
Esta antigua casona, que data del siglo XVI, ha sido restaurada y convertida en un centro cultural y museo de sitio, ofreciendo a los visitantes un viaje al pasado prehispánico y colonial de la ciudad.
Manzanares 25, también conocida como Casa de Juan de Cervantes, fue construida en 1590 por orden de Juan de Cervantes, un contador real y uno de los primeros pobladores de la Ciudad de México.
La casona, que después se hizo vecindad, fue construida en estilo virreinal. Se sabe que además, fue testigo de los avatares de la ciudad a lo largo de los siglos.
Un espacio para el arte y la cultura
Tras años de abandono, el lugar fue rescatado por el gobierno de la Ciudad de México en 2010. Desde entonces, se ha convertido en un espacio vibrante para el arte y la cultura.
El centro cultural alberga exposiciones de arte contemporáneo, talleres, conferencias y eventos especiales.
En el sótano de la casona se encuentra el museo de sitio, que exhibe una colección de artefactos arqueológicos hallados durante las excavaciones realizadas en el predio.
Las piezas, que datan del período preclásico y colonial, ofrecen una valiosa información sobre la historia de la ciudad y sus antiguos habitantes.
Un atractivo turístico en auge
Manzanares 25 se ha convertido en un atractivo turístico en auge. Los visitantes pueden recorrer la casona, admirar su arquitectura colonial y conocer la historia de la ciudad a través de las exposiciones del museo.
El centro cultural también ofrece una programación cultural variada que atrae a un público diverso.
Este lugar es más que un simple edificio histórico. Es un símbolo de la resistencia cultural y la lucha por la preservación del patrimonio histórico de la Ciudad de México.
Su recuperación y transformación en un centro cultural han demostrado que la historia no tiene que ser olvidada, sino que puede ser revalorada y compartida con las nuevas generaciones.