Hoy, 7 de agosto, se celebra el Día Mundial de los Faros, una conmemoración que tuvo su origen en Estados Unidos, donde era una festividad nacional. La fecha fue elegida para recordar la firma de la Ley de Establecimiento y el Apoyo de Faros, Balizas, Boyas y Muelles Públicos, aprobada por el Congreso de Estados Unidos en 1789.
A lo largo del tiempo, esta celebración ha trascendido fronteras y varios países se han sumado para rendir homenaje a estas icónicas estructuras que han sido guías indispensables para la navegación marítima.
En México, esta fecha es una oportunidad para reconocer la relevancia histórica y cultural de los faros que se encuentran a lo largo de nuestras costas. Estas imponentes construcciones han sido testigos de la evolución marítima del país y símbolos de seguridad y protección para los navegantes.
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La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) ha publicado una obra fascinante titulada «Faros de México. Los guías de altamar» (2015), que nos ofrece un recorrido gráfico por los faros más importantes ubicados en las costas del Pacífico y el Golfo de México. Esta publicación tiene como objetivo resaltar la relevancia histórica de estos emblemáticos puntos de referencia en los puertos mexicanos. Los faros no solo son símbolos de orgullo y pertenencia para las comunidades costeras, sino también testimonios del esfuerzo modernizador que México ha llevado a cabo a lo largo de los años.
Aunque en la actualidad los modernos métodos de navegación, especialmente el sistema de posicionamiento global (GPS) satelital, han vuelto obsoletos a muchos faros alrededor del mundo, siguen siendo una parte esencial de la historia marítima de México. Actualmente, en los litorales de la República Mexicana, se encuentran en funcionamiento 135 faros, algunos de los cuales son auténticas joyas arquitectónicas. Los más antiguos están construidos en mampostería, otros son de concreto, mientras que los más recientes están hechos de sólidas estructuras de acero.
La SCT clasifica los faros mexicanos en tres categorías principales:
- Faros de recalada: Estos se instalan en puntos estratégicos de los puertos o en áreas de gran importancia a lo largo de las costas o en islas con un alto tráfico marítimo. Su función principal es facilitar la llegada y aproximación de los buques.
- Faros intermedios: Ubicados en puntos conocidos de la costa, complementan la labor de los faros de recalada al ofrecer auxilio y orientación adicional a los navegantes.
- Faros de situación: Estos faros señalan accidentes geográficos relevantes o puntos de peligro para la navegación, como costas, arrecifes, puntas, cabos, islas, entre otros.
Si sientes curiosidad por explorar más a fondo este fascinante tema, te recomendamos consultar la publicación «Faros de México. Los guías de altamar». En sus páginas encontrarás información detallada sobre la historia, la arquitectura y la importancia de estos faros en la navegación y en la identidad costera de México.
Además, si te animas a visitar algunos de los faros más destacados de México, aquí tienes una lista con algunos de los mejores:
- El Faro de Mazatlán: Un icónico faro que se alza majestuosamente en Mazatlán, Sinaloa, ofreciendo impresionantes vistas del océano Pacífico y la ciudad.
- El Faro de Puerto Vallarta: Un faro pintoresco en Puerto Vallarta, Jalisco, que brinda una experiencia inolvidable en un entorno paradisíaco.
- Punta Molas Faro: Ubicado en la Isla de Cozumel, Quintana Roo, este faro te sorprenderá con su belleza natural y vistas panorámicas.
- Faro de Puerto Morelos: Situado en la Riviera Maya, Quintana Roo, este faro histórico te transportará a tiempos pasados mientras disfrutas del encanto caribeño.
- El Faro de Cabo Falso: Se alza majestuosamente en Cabo San Lucas, Baja California Sur, ofreciendo espectaculares vistas del Océano Pacífico y el Mar de Cortés.
Descubre la fascinante historia y belleza de los faros de México, símbolos de navegación y guardianes de nuestras costas.
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