Si de viajes románticos se trata, pocos destinos pueden darse el lujo de Italia pero sobre todo Verona, ese lugar emblemático que William Shakespeare habría escogido para crear la romántica historia de Romeo y Julieta. Por lo que un viaje romántico a Verona no estaría completo a sin la visita obligada a la Casa de Julieta.
Sin embargo, muchos dicen que Shakespeare nunca pisó Verona y que dicho lugar es mera obra de la mercadotecnia. Lo que se sabe es que es un palacio de principios del siglo XIII que perteneció a una familia de apellido Dal Capello, como se lee en una insignia que cuelga todavía de la fachada y que da el nombre a la calle adyacente.
La fecha y el apellido Dal Capello hicieron crecer la teoría de que esta casa perteneció a los Capuletti, que era la familia de Julieta, que a su vez se oponía al amor de su hija con Romeo, quien pertenecía a los Montesco, eternos rivales. De ahí que los enamorados se quitaron la vida, producto de una confusión, y su amor perduró a través del tiempo.
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El ventanal gótico y el balcón que tanto se identifica con la historia de amor de Romeo y Julieta fueron creados a comienzos del siglo XX, para acrecentar más la leyenda.
Pero sean peras o son manzanas, en Verona se respira amor por todos sus rincones. Entre sus calles es común ver a las parejas caminar tomadas de la mano, comer juntos o besarse en plena plaza.
La Casa de Julieta se encuentra en la vía Cappello N°23, a escasos metros de la Piazza delle Erbe. La casa pasaría desapercibida de no ser por los decenas de turistas de todas partes del mundo que se dan cita para dejar sus cientos de cartas de amor donde se juran amor eterno.
En el patio de la Casa de Julieta fue colocada una enorme estatua de bronce de Julieta Capuleto, realizada por el escultor italiano Nereo Constantini, misma que tiene una tradición, aquel visitante que le toque el seno derecho a la escultura tendrá suerte en el amor.
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También es un lugar muy concurrido por aquellos a los que les han roto el corazón o tienen un amor imposible, por eso acuden a la Casa de Julieta, además de todos aquellos que se encuentran a la espera del verdadero amor.
Pero eso no es todo, existen las secretarias de Julieta, así se hacen llamar, son personas encargadas de dar respuesta a los cientos de cartas y peticiones que les hacen llegar los enamorados y de aquellos a los que no les ha ido bien en los asuntos del corazón y siguen esperando que llegue esa persona especial. Todas las respuestas son escritas a mano y de forma personalizada.
Cabe recordar que tal ha sido el boom de esta Casa de Julieta que el diario The Wall Street Journal publicó un artículo sobre dicha labor de las secretarias de Julieta y, en 2010 se hizo el famoso filme de comedia romántica titulado ‘Cartas a Julieta‘, protagonizado por la actriz Amanda Seyfried. Lo que desencadenó que llegara correspondencia a Julieta de todas partes del mundo.
Las paredes de este emblemático lugar se tapizan de cientos de cartas dos veces al año, antes del 14 de febrero (día de San Valentín) y el 17 de septiembre (cumpleaños de Julieta), que son las fechas en que más visitantes se dan cita.