Dos activistas del grupo ecologista «Just Stop Oil» rociaron con pintura naranja partes del monumento prehistórico de Stonehenge en Inglaterra, en una protesta contra el uso de combustibles fósiles.

El incidente ocurrió este miércoles, un día antes del solsticio de verano, cuando Stonehenge suele atraer a grandes multitudes.

Los activistas, una mujer de 21 años y un hombre de 73 años, fueron detenidos por la policía poco después de que arrojaran la pintura naranja sobre las piedras.

En un video publicado en redes sociales por Just Stop Oil, se puede ver a los activistas corriendo hacia el monumento y rociando la pintura mientras gritan consignas como «¡No más petróleo!» y «¡Detengan el cambio climático!».

Just Stop Oil ha declarado que la acción tenía como objetivo destacar la necesidad de una acción urgente para combatir el cambio climático.

El grupo argumenta que la dependencia de los combustibles fósiles está destruyendo el planeta y que es necesario una transición rápida hacia fuentes de energía renovables.

Reacciones al incidente

El incidente ha generado reacciones encontradas. Algunos han expresado su apoyo a la acción de los activistas argumentando que es necesario un activismo más radical para llamar la atención sobre la crisis climática.

Otros han criticado la acción, calificándola de vandalismo y señalando que daña un monumento histórico invaluable.

La pintura utilizada por los activistas es lavable y se espera que pueda ser eliminada sin dañar las piedras de Stonehenge. Sin embargo, el incidente ha generado preocupación por la seguridad del monumento y ha llevado a las autoridades a aumentar las medidas de seguridad en el sitio.