Seguramente has escuchado que en los últimos meses son más las ciudades turísticas que se están sumando a la oleada de ciudadanos locales que se han empezado a manifestar en contra del turismo.
El argumento es la manera en que el turismo ha provocado cierto efecto no solo de gentrificación y por tanto, incremento en productos y rentas, también el supuesto no cuidado del lugar por parte de los viajeros que llegan, salen de fiesta, por ahí algunos hacen sus desmanes, y obvio, luego se van.
Barcelona no es la excepción. Algunos ciudadanos se han vuelto antituristas y hasta con pistolas de agua han atacado a los viajeros, ya sea cuando estos caminan por las calles de esta hermosa ciudad, o simplemente degustando algo en un restaurante.
Pero qué tal sería escuchar lo que está pasando al respecto en Barcelona.
En Viaje todo incluido entrevistamos a una mexicana, María Fernanda Ortiz, quien lleva dos años viviendo en esa ciudad española. Ella nos reveló todo lo que actualmente está sucediendo.
“Desde el año pasado comenzaron (las manifestaciones). La época más fuerte de turistas es el verano, sobre todo ingleses y de países nórdicos que desean venir a lugares calurosos.
“El año pasado empezaron las manifestaciones pero no tan fuertes como las de este año”, dijo en entrevista.
María Fernanda resaltó que después del Covid-19 varios extranjeros viajaron a Barcelona pero para situarse en esta ciudad, lo cual encareció las rentas.
“Ahora, muchos restaurantes están enfocados en los turistas”, dijo.
“El año pasado empezaron con manifestaciones diciendo ‘turistas váyanse a casa’”, comentó María Fernanda, quien actualmente es profesora de español para extranjeros, y de inglés.
“¿Qué tanta gente está en contra de esto?, se le preguntó a María Fernanda.
