Si aún no conoces Sonora, ¿qué te parece si en tu lista de propósitos de Año Nuevo emprendes el viaje hacia El Pinacate y Gran Desierto de Altar? Es una de las regiones más sorprendentes del estado por sus conos volcánicos y cráteres gigantes prometen una experiencia única, inigualable.
A este paisaje se suman sus dunas tipo estrella y conos cineríticos, que también forman parte de las características geológicas peculiares que posee este lugar mágico, considerado como un Áreas Natural Protegida, con una extensión de aproximadamente 715 mil hectáreas.
Cuenta con un vasto acervo de vestigios arqueológicos que se remontan a más de 20 mil años atrás. Un sitio que para la cultura de los Tohono O’odham representa el origen de su creación; de hecho, hoy en día continúan realizando ceremonias sagradas en el Pico Pinacate.
La maravillas de El Pinacate y Gran Desierto de Altar
En esta región se encuentra el sistema de dunas más grande del Norteamérica, algunas llegan a medir hasta 200 metros de altura.
Al realizar tu travesía en este destino de Sonora, Experiencias Inolvidables, te acompañará un paisaje impresionante, con caminatas que te llevan hacia colosales formaciones de arena, mientras observas la Sierra Blanca en el horizonte.
Pero siguiendo el ritmo del recorrido, las formaciones naturales continúan ante la vista de los visitantes, más de 10 cráteres con circunferencias gigantescas y 400 salidas petrificadas de lava, es el rastro que dejó a su paso el escudo volcánico en medio del desierto sonorense que conforma El Pinacate y Gran Desierto de Altar.
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Es el sitio perfecto para el desarrollo de varias formas de vida: alrededor de 200 especies de aves hacen sus nidos en este desierto; es habitado por 40 mamíferos, el mismo número es representado por reptiles, además de anfibios y peces. Por si esto fuera poco, te contamos que entre su suelo surge la vida de 540 especies de plantas, algunas endémicas.
Por sus formaciones geológicas; riqueza biológica y paisajística; por ser testigo de la ocupación humana; sitio sagrado y de importante valor histórico y cultural, recibió el decreto como Reserva de la Biosfera El Pinacate y Gran Desierto de Altar, desde 1993. Por eso, cuando las condiciones lo permitan, no debes dejar de #VisitSonora.
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