Entre los caminos de la Reserva la Biosfera de El Cielo, encontramos un ejido de nombre La Joya de Manantiales, en Tamaulipas. Uno de los rincones de México, más aislados de la humanidad, pero repleto de una rica biodiversidad que acompaña sigilosamente tu travesía, la cual tiene como parada final, el encuentro con sus cascadas de caídas exorbitantes.
La mejor época del año para dejarse llevar por estos enigmáticos saltos, es durante la temporada de lluvias, cuando la creciente de los ríos dejan caer torrencialmente sus aguas. Para llegar hasta este paraje, hay touroperadoras que te llevan en vehículos 4X4, que se rentan en Gómez Farías, municipio al que pertenece dicho poblado.
Sin embargo, la mejor experiencia se vive recorriendo sus senderos a pie, para extasiarse con la abundante y diversa vegetación, que forma parte de La Joya de Manantiales, donde cohabitan ecosistemas diferentes: en minutos, árboles de las tierras frías se mezclan con las selvas tropicales, bajas y medianas.
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Joya de Manantiales es una de las cascadas más famosas en la Reserva de la Biósfera El Cielo en #Tamaulipas. Ésta comprende 144,000 hectáreas distribuidas en 4 municipios (Ocampo, Jaumave, Llera y Gómez Farías)
— Turismo Tamaulipas (@VisitTamaulipas) May 23, 2021
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¿Cómo llegar a La Joya de Manantiales?
La distancia que se recorre es de 12 kilómetros, entre una pendiente que resulta amable para la práctica de senderismo. Una distancia que con todo y paradas para fotografías, contemplación y observación de especies, toma un tiempo de tres horas. La última parte del trayecto es de bajada, así que resulta más sencillo de lo que se piensa.
Algunos guías dividen la travesía hacia La Joya de Manantiales, en tres segmentos, cada uno integrado por cuatro kilómetros: El primero arriba al ejido La Gloria, conformado por bosque de niebla, hábitat de pumas y osos. Desde este punto se llega a la zona donde se ubica la famosa Piedra de Elefante, llamada así, por su similitud a este paquidermo.
La formación rocosa mide cuatro metros de altura y siempre roba las cámaras de los visitantes, o lo toman como su escenario principal para las fotos del recuerdo. Es justo en este lugar donde comienzan los contrastes, pues el ambiente cambia a bosque de pino y encinos, con árboles alcanzan hasta 40 metros de altura.
Finalmente se llega a La Joya de Manantiales, donde incluso el clima y la humedad cambian drásticamente, para mostrar una vegetación menos densa y se deja sentir un poco de calor, que seguramente refrescarás entre sus cascadas que desembocan en pequeños ríos. Sin duda uno de los senderos más aislados de la humanidad, elemento que permite vibrar completamente su magia y belleza natural.
Cómo llegar
Este destino se ubica en Camino hacia Alta Cima Km. 3, S/N, Gómez Farías, Tamaulipas, México. Para arribar, hay que llegar directamente a este municipio que forma parte de la Reserva la Biosfera de El Cielo. Partiendo de Ciudad Victoria, hay que tomar con dirección a Ciudad Mante, para buscar el entronque hacia Gómez Farias, un recorrido que dura hora y media. A partir de este punto, se llega caminando o en vehículo 4X4 a La Joya de Manantiales.
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