La Sierra de Pénjamo se ubica en Guanajuato y forma parte de la región hidrológica de mayor importancia de la Cuenca Lerma-Chapala, que genera una significativa recarga de los acuíferos Río Turbio y Pénjamo-Abasolo. Sin embargo, su relevancia destaca por su riqueza biológica y de bellos paisajes.
Dentro del área de la Sierra de Pénjamo se localizan estructuras de gran relevancia para la acumulación de agua, entre las que destacan las presas de Mariano Abasolo, La Alberca, El Aguacate, Corralejo y La Golondrina, al igual que cuerpos de agua como La Joya de la Mula, La Loma y La Ciénega.
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La Sierra de Pénjamo cuenta con una gran biodiversidad por sus 3 ecosistemas diferentes, es uno de los grandes atractivos en el Municipio y el Estado de Guanajuato, por su flora, fauna, arroyos, cañones, cascadas y sus paisajes naturales.
Además, se ha promocionado en los últimos años para la práctica del ecoturismo, por lo que esta zona requiere la atención de las diferentes instancias correspondientes, para preservar la conservación de su medio ambiente, luego de haber sido declarada como Área Natural Protegida en la categoría de “Área de Uso Sustentable”.
Las bellezas de la Sierra de Pénjamo
Aquí podrás encontrar sus elevaciones más notables, justo en las zonas de El Gallo, Mariangola, Bravo, Alto, Las Cristianas y El Desmonte.
También hay cerros con una altura promedio de 2 mil 200 metros sobre el nivel del mar, por ejemplo: El Metate, Barajas, La Corona, Cerro Grande, El Guaje y La Viga, forman cañones como el Pansacola, Las Tablas, El Fuerte y el de los Murciélagos.
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Estos son espectaculares porque sus arroyos bajan por estos cañones y regalan infinidad de espectaculares paisajes, sobre todo durante la temporada de lluvias.
Aquí las personas pueden realizar diferentes actividades como la práctica del rappel y cañonismo, que se puede hacer en la mayoría de sus cerros.