El Taj Mahal es un monumento emblemático de India que se construyó entre 1631 y 1653; en México fue replicada su belleza en la comunidad de Las Cruces, a sólo 12 kilómetros de Acámbaro, en Guanajuato.
Se trata de un templo creado para venerar a la Virgen de Guadalupe e inspirado en la imponente arquitectura del Taj Mahal.
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Un Taj Mahal «migrante»
Se inauguró el 28 de diciembre de 2014 y es obra del arquitecto José Ignacio, quien para edificarlo requirió de las aportaciones voluntarias que enviaban migrantes, razón por la cual su construcción demoró 11 años.
Sus acabados son de cantera de Tlalpujahua (Michoacán), por lo que su construcción fue sumamente costosa. Además, cuenta con un patrón similar al Taj Mahal en cuanto a sus acabados y arquitectura de tipo islámica, persa, india y turca.
Está compuesto de cinco cúpulas, así como de arcos con vitrales y diversos detalles de la arquitectura neoclásica. Sobresalen cuatro torres, ubicadas en las esquinas del templo, mismas que le brindan un toque imponente a la construcción.
Su magnificencia ha convertido a este templo en una de las maravillas que guarda Guanajuato, sorprendiendo a propios y a extraños por su belleza y parecido con la emblemática construcción de India.
El templo original se encontraba en otra parte del pueblo, pero fue derribado para luego edificarlo en el actual predio que pertenecía a Francisco Uribe, quien se los heredó a sus hijas para que se construyera allí.
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