Quizá muchos recuerden el Muelle de San Blas por la famosa canción del mismo nombre de la banda mexicana Maná; sin embargo, esta composición también forma parte de la historia que encierra este lugar, también conocido como el Muelle del desamor, ¿sabes dónde está y cómo llegar? A continuación te lo decimos.
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Ruta para llegar al Muelle de San Blas
«Miles lunas pasaron y siempre estaba en el muelle esperando», versa la canción de Maná sobre el Muelle de San Blas, un destino mexicano que se encuentra en Nayarit. Para llegar a este lugar puedes tomar un autobús en la Central del Norte con dirección a Tepic. El costo aproximado es de $1000 pesos en adelante, según la opción que elijas.
Existen varias opciones para viajar a Tepic, como: Omnibus de México, Futura, Elite, Pacífico, Norte de Sonora, Pacífico ATP y Turistar. La mejor opción para dirigirte al Muelle de San Blas es en la corrida nocturna, esto te permitirá dormir ya que el trayecto es de alrededor de 9 horas.
Una vez en Tepic, Nayarit, deberás abordar otro autobús hacia San Blas, cuyo costo aproximado es de $95 pesos. Las corridas salen constantemente y la duración del trayecto es de 1:40 horas. En San Blas existen diferentes opciones de alojamiento, por lo que podrás encontrar pequeños hoteles y hostales desde $500 pesos, y lo mejor de todo es que tienen alberca y algunos se encuentran cerca de la playa o el Muelle de San Blas.
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Historia de Rebeca
La canción de Maná está basada en la historia de Rebeca Méndez Jiménez, quien se enamoró de un marinero que zarpó hacia el mar con la promesa de volver; sin embargo, jamás volvió. Es por eso que Rebeca esperó día y noche a su amado en el Muelle de San Blas.
La vida de Rebeca estuvo marcada por la desgracia y desolación, pero eso no le impidió frecuentar el Muelle de San Blas, donde —según cuentan— conoció únicamente de vista a Fher Olvera, vocalista de la banda Maná, quien habría decidido plasmar su historia en una de sus canciones, misma que se convirtió en todo un éxito.
Según medios locales, Rebeca Méndez llegó a escuchar tan emotiva y triste canción de Maná compuesta en su honor y se asegura que sentía gran emoción al oírla. Pese a ello, Fher Olvera y Rebeca jamás volvieron a verse.