La aplicación de vacunas contra la Covid-19 han ayudado para que el mundo entero empiece a dejar el confinamiento atrás y el turismo se reactive, con todas las medidas sanitarias; sin embargo, las estafas de viajes también comienzan a hacerse presentes y están a la orden del día.
Los viajes y el turismo de a poco están volviendo a la «normalidad», pues con la aplicación de vacunas la movilidad mundial comienza a flexibilizarse y cada vez más personas viajan. Desafortunadamente, organizaciones encargadas en la defensa del consumir han reportado un incremento en las estafas de viajes.
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Estafas de viaje se acrecientan pese a pandemia
Pues los abusivos han comenzado a hacer de las suyas a través de la creación de paquetes vacacionales sumamente atractivos, ofertas irresistibles en tarifas aéreas, descuentos en alojamientos y demás artimañas cuyo único propósito tienen engañar a la gente y arrebatarles su dinero.
Better Business Bureau, una de las organizaciones encargadas de la defensa del consumidor, reveló que las estafas de viajes han aumentado de forma considerable a través del telemarketing, ya que los estafadores se inventan cargos para engañar a las personas que están habidas por dejar el encierro.
Otra forma de estafar es a través de sitios fantasma, los cuales suplantan o imitan a plataformas legítimas de reserva de vuelos, hoteles y vehículos, en los que las personas ingresan sus datos personales y bancarios sin saber que se trata de un fraude.
Esta práctica va en aumento a medida que el turismo se reactiva. De acuerdo con RoboKiller, una app de llamadas de spam y bloqueador de texto, las estafas de viaje a través del telemarketing alcanzará lo 4.900 millones en Estados Unidos durante el presente año, lo que representa un aumento del 80% respecto a 2020.
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Robo de información
Como mencionamos anteriormente, las estafas de viajes tienen un fin común, robar la información de los usuarios, principalmente la financiera, que tiene que ver con tarjetas de débito y crédito, así como los datos personales, que a la larga puede tener finales desastrosos. Pero estas prácticas no son exclusivas de un país, sino el mundo entero es susceptible de ser estafado.
