El turismo cultural en México, aunque sigue siendo un motor importante para la economía, experimentó una leve desaceleración en el primer semestre de 2024.
A pesar de registrar 9.8 millones de visitantes a zonas arqueológicas y museos, lo que representa un aumento anual del 5.1%, este crecimiento fue inferior al del año pasado.
Lo más notable de este periodo fue el contraste entre la evolución del turismo en museos y zonas arqueológicas.
Mientras los museos experimentaron un notable crecimiento del 23.6% en el número de visitantes, las zonas arqueológicas sufrieron una disminución del 8.6%. Esta tendencia sugiere que los turistas están mostrando un mayor interés por experiencias culturales más inmersivas y enriquecedoras, como las que ofrecen los museos.
De acuerdo con Sectur, los museos con más visitas fueron el Nacional de Historia, Antropología, Templo Mayor, Nacional de las Culturas y el Fuerte de San Juan Ulúa.
En cuanto a las zonas arqueológicas más frecuentadas fueron Chichén Itzá, Teotihuacán, Tulum y Monte Albán.
Turismo cultural: Factores que Influyen en la tendencia
- Cambio en los hábitos de consumo:
La pandemia aceleró la digitalización y generó nuevos hábitos de consumo entre los turistas. Muchos optan ahora por experiencias más personalizadas y menos masificadas.
- Competencia internacional:
El creciente interés por destinos culturales en otras partes del mundo puede estar atrayendo a una parte de los turistas.
- Aumento de los costos:
El incremento en los precios de los boletos, alimentos y hospedaje puede estar disuadiendo a algunos visitantes, especialmente a los nacionales.
Un desafío para el sector
La desaceleración en el turismo a zonas arqueológicas representa un desafío para el sector. Las autoridades turísticas y los operadores deben adaptarse a esta nueva realidad y desarrollar estrategias para atraer a más visitantes. Algunas opciones podrían incluir:
- Diversificación de la oferta:
Crear experiencias turísticas más completas, que combinen la visita a zonas arqueológicas con actividades culturales y de aventura.
- Promoción de destinos menos conocidos:
Destacar la riqueza cultural de sitios arqueológicos menos masificados.
- Fortalecimiento de la infraestructura turística:
Mejorar el acceso a las zonas arqueológicas y ofrecer servicios de mayor calidad.
A pesar de los desafíos, el futuro del turismo cultural en México sigue siendo prometedor.
El país cuenta con un patrimonio cultural inigualable y un gran potencial para atraer a visitantes de todo el mundo. Al adaptar las estrategias de promoción y desarrollo turístico a las nuevas tendencias, México podrá seguir siendo un destino líder en el segmento cultural.