Chihuahua es un estado sumamente rico en belleza natural y para muestra está la cascada Piedra Volada, la cual es la más alta de México y se localiza en las entrañas de la Sierra Madre Occidental, específicamente en la Barranca de Candameña, dentro del Parque Nacional Basaseachi.
Piedra Volada, un paraíso de aguas cristalinas
Dentro del Parque Nacional Basaseachi se ubican dos de las cascadas más altas de toda la República Mexicana: Basaseachi y Piedra Volada; sin embargo, en esta ocasión hablaremos de la segunda, cuya altura es de 453 metros, por lo que ya podrás darte una idea de su majestuosidad, no por nada es la más alta de México.
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Este imponente salto de agua se encuentra al límite sur del Parque Nacional Basaseachi y cuenta con impresionantes aguas cristalinas que parecieran caer del cielo. Como se mencionó anteriormente, la cascada de Piedra Volada se encuentra en la Barranca de Candameña, cuya profundidad es de 1750 metros, mayor a la de las Barrancas del Cobre.
Algo curioso de este maravilloso salto de agua es que se esconde durante el invierno. En la época de lluvia (julio y octubre) la cascada luce imponente y se puede apreciar en todo su esplendor desde el mirador de Hayumar, en donde los visitantes más extremos se pueden columpiar un poco al filo de la barranca.
Origen de su nombre
Su encanto y majestuosidad hechizan a propios y a extraños con solo mirarla. Su nombre deriva de la una roca saliente al filo de la montaña, que se ubica sobre el arroyo del mismo nombre, el cual provee a las cascada.
¿Qué hacer en Piedra Volada y cómo llegar?
Para llegar desde Chihuahua hay que tomar la carretera a Hermosillo hasta el entronque Las Estrellas, que está pasando Tomochi. Esta desviación conduce a un camino que debes seguir por 12 kilómetros antes de llegar a Huajumar.
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Para poder llegar a la cascada de Piedra Volada existe un sendero de 2 kilómetros que es en su mayoría de subida, e incluye caminos de bosque y secciones donde hay que escalar entre las rocas.
Muy cerca de ahí se encuentra el mirador de El Elefante, llamado así porque en la pared de su barranca se puede apreciar la forma de un paquidermo, por lo que este lugar es perfecto para hacer excursionismo, exploración, campismo, rappel y ciclismo de montaña.
Otro dato curioso es que no tiene mucho que fue descubierto este sitio, ya que fue hasta 1995 cuando se realizó la primera expedición.