Chakanbakán, en Quintana Roo, es uno de esos lugares donde existen vestigios que pertenecieron a diferentes pasados, pero de una riqueza tal que día tras día su investigación continúa.
Ubicado a 90 kilómetros de Chetumal, esta esta ciudad maya comenzó a estudiarse en la década de 1980, con un equipo liderado entonces por el arqueólogo Fernando Cortés.
Pero los estudios sobre la importancia de este recinto —el cual permanece cerrado al público— no se han detenido. Ni han dejado de sorprender.
¡Iniciamos 1er diplomado Mayas en el INAH!
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Hoy presentamos:
Módulo 1 – Arqueología: problemáticas y nuevos hallazgos Chakanbakán, por Fernando Cortés (INAH QRoo).
Dirección de Estudios Históricos
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“La ciudad maya de Chakanbakán se construyó en un lugar estratégico, para poder repeler con facilidad, ya fuera por tierra o por agua, cualquier ataque externo”, destaca el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Asimismo, “las características topográficas son excepcionales; la distribución del sector central construido en la parte alta y la construcción de edificios con dimensiones extraordinarias, les permitían a sus habitantes estar a salvo en caso de inundaciones y de huracanes”, señala el organismo.
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Chakanbakán a través de los siglos
De acuerdo con varios informes del INAH, se calcula que su fundación data del Preclásico tardío, entre los años 300 y 50 a.C., cuando arribaron los primeros habitantes procedentes, probablemente, del Petén guatemalteco.
Sin embargo, la época de esplendor de Chakanbakán se presentó en el periodo Clásico, entre los años 250-900/1000 de nuestra era. Fue en ese tiempo cuando el asentamiento adquirió su máxima extensión.
Finalmente, la ciudad fue habitada hasta el Postclásico tardío, entre los años 1200 y 1545.
En una conferencia reciente, Fernando Cortés de Brasdefer, investigador del Centro INAH Quintana Roo, mencionó uno de los edificios de Chakanbakán: el Nohochbalam.
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Con retrospectiva a Chakanbakán, inició el diplomado “Mayas en el INAH. Visiones interdisciplinarias", que será trasmitido en vivo y con libre acceso.
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Esta edificación fue decorada con mascarones de un estilo que, se teoriza, “pudo haber formado parte del paso de la tradición olmeca en la escultura —la cual mezclaba rasgos humanos, animales e, incluso, míticos al momento de erigir monumentos para los gobernantes— a las formas naturalistas que predominaron durante el periodo Clásico maya (200-900 d. C.)”, destacó el especialista.
La importancia de Chakanbakán radica también en su riqueza biológica. Por ello se han implementado programas de reforestación y reintegración de flora y fauna.
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¿Cómo llegar a Chakanbakán?
Se encuentra a 90 kilómetros de Chetumal, la capital del estado de Quintana Roo. La ruta terrestre: tomar la carretera federal Chetumal-Escárcega (número 186) hacia la aduana situada cerca de los límites de Quintana Roo y Campeche.
De allí, hay que llegar al entronque del poblado de Caobas. Precisamente en Caobas se encuentra la entrada a Chakanbakán; debes recorrer u kilómetro de carretera asfaltada y un kilómetro de terracería.