Veracruz es un estado que tiene mucho por ofrecer al turismo y Tlacotalpan es un destino que no puedes dejar de visitar, se encuentra junto al río Papaloapan y esconde una riqueza cultura, arquitectónica, gastronómica, musical y natural digna de admirar.
Historia y significado
Es un antiguo territorio totonaca, hasta que en los siglos XIII y XIV, fue ocupado por los toltecas. El primero europeo en tener contacto fue Pedro de Alvarado, quien navegó por el río Papaloapan. Para 1521, una vez consumada la conquista, se otorga como encomienda al soldado Alonso Romero, hasta que pasó a ser una jurisdicción real.
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Posteriormente, los españoles le otorgan el nombre de San Cristóbal Tlacotalpan. Para el siglo XVII, Tlacotalpan ya se distinguía por ser una ciudad colorida llena de haciendas con importante presencia de españoles.
En 1741 hubo un desbordamiento del Papaloapan y, años después, en 1788 se incendió la cabecera, por lo que se obligó a la gente a construir inmuebles con mampostería, dando paso a edificios virreinales con arcos y techos de teja que hasta la fechan enamoran a decenas de turistas.
Tlacotalpan significa en la tierra de las jarillas o varas; proviene del vocablo Tlátcolt, jarra o verdasca; Tlalli, tierra y Pan, encima.
Tlacotalpan: «La Perla del Papaloapan»
Tlacotalpan es una de las ciudades más hermosas de México, también es conocida como la «Perla del Papaloapan«, ya que emerge de los alrededores de este arroyo y en 1998 fue declarado como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco.
«La Perla del Papaloapan«, fundada en el siglo XVI por los españoles, es uno de los pueblos más coloridos de la República Mexicana, y destaca por sus costumbres, tradiciones, así como por sus construcciones que parecieran atrapadas en el tiempo y cuyo estilo neoclásico enamora a simple vista.
¿Qué hacer?
Su Centro Histórico es sumamente hermoso, de ahí que recibiera el nombramiento de Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco en 1998, entre sus principales atractivos, destacan la Capilla de Nuestra Señora de la Candelaria, la cual se ubica en el centro, así como algunos edificios llenos de historia como el Museo Salvador Ferrando y el Teatro Nezahualcóyotl.
Otros de los sitios que debes visitar son el parque Ignacio Zaragoza, la Parroquia de San Cristóbal y el Templo de la Virgen de la Candelaria, el Palacio Municipal y la Casa de Cultura «Agustín Lara» .
Pero no solo destaca por su arquitectura, sino también por su ritmo de vida y estilo colonial que sobresale de gran manera con los tradicionales sones jarochos, ritmos que surgieron en el siglo XVIII, producto del mestizaje y expresiones musicales europeas, africanas y originarias.
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Su gastronomía merece una mención aparte, destacan exquisitos platillos hechos a base de productos del mar como el tapado de jolote, el tamal de cazuela, el piripituche o caldo de camarón, jaiba, el canate (pato migratorio) al mojo de ajo, las empanadas de camarón o el típico arroz a la tumbada.
¿Cómo llegar?
Se puede llegar por la autopista México-Puebla-Orizaba-Córdoba-La Tinaja-Cosamaloapan, para llegar aquí hay que tomar la libre en un tramo de 42 kilómetros; otra opción es seguir el camino hacia Veracruz, desviándose en Paso del Toro para tomar la carretera costera, pasando por Alvarado hasta la desviación hacia Tlacotalpan.