El Cuexcomate, un pequeño gigante de la naturaleza, ostenta el título del volcán más pequeño del mundo, con una altura de tan solo 13 metros y un cráter de 8 metros de diámetro.
Se encuentra ubicado en la ciudad de Puebla, México, rodeado por una plaza pública en la junta auxiliar La Libertad.
El Cuexcomate nació en el año 1064, producto de una erupción del volcán Popocatépetl. La lava brotó del cráter del Popocatépetl y formó un cono volcánico de pequeño tamaño, el Cuexcomate.
A diferencia de su «padre», el Cuexcomate se encuentra inactivo desde hace siglos.
Cuexcomate, un lugar lleno de historia
El Cuexcomate ha sido testigo de la historia de Puebla desde su formación.
En la época prehispánica, era un lugar sagrado para los antiguos habitantes de la región. Posteriormente, durante la colonia, fue utilizado como cantera para la construcción de la ciudad.
A pesar de su pequeño tamaño, el Cuexcomate es un atractivo turístico único. Su peculiar forma y su historia lo convierten en un lugar interesante para visitar.
Los visitantes pueden subir a la cima del volcán y disfrutar de una vista panorámica de la ciudad.
Pero, ¿Qué hace tan especial a Cuexcomate?
El Cuexcomate es un lugar especial por varias razones:
- Es el volcán más pequeño del mundo: Un dato curioso que lo convierte en una rareza geológica.
- Su historia: Ha sido testigo de la historia de Puebla desde su formación.
- Su ubicación: Se encuentra en una zona urbana, lo que lo hace accesible a los visitantes.
- Su belleza: Su forma cónica y su cráter lo convierten en un lugar pintoresco.
Si estás planeando un viaje a Puebla, no olvides visitar el Cuexcomate. Es un lugar pequeño, pero con una gran historia y una belleza única.
