Oriunda del estado de Tlaxcala, la historia de las tlahuelpuchis relata que estas son una especie de nahuales que tienen la capacidad de convertirse en animales y cometer actos atroces.
Estas entidades sobrenaturales generalmente se asocian a un ser femenino, aunque se cree que también existen varones. Estos son una mezcla entre hechiceros y vampiros que se alimentan de sangre animal y humana, específicamente de niños.
Según la leyenda, las tlahuelpuchis son mujeres de apariencia normal que fueron víctimas de una maldición o que practican la magia negra. Esa es la razón por la que poseen poderes sobrenaturales como transformarse en animales y control mental.
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Las mujeres portadoras de estos «dones» se enteran de las capacidades sobrenaturales en la pubertad, justo cuando tienen su primera menstruación. Es en ese momento cuando tienen el primer contacto con sus poderes.
Con el tiempo y la práctica es posible que puedan desarrollar sus habilidades por completo, hasta lograr la técnica más poderosa de todas, que es convertirse en animales, principalmente aves.
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Características de las tlahuelpuchis
- Para llevar a cabo su ritual de transformación, estos demonios preparan un fogón con madera de capulín al que le agregan agave, copal y hojas secas. Una vez encendido el fuego, deben caminar tres veces sobre las brasas en forma de cruz y sentarse en el calor para que sus extremidades se desprendan del cuerpo.
- Una vez que las tlahuelpuchis logran tomar la forma de un animal, ellas desprenden luces que advierten su presencia. Estas luces son parecidas a las de las luciérnagas.
- Se cree que las tlahuelpuchis son territoriales y no conviven entre ellas. Ellas son capaces de reconocerse unas a otras en las calles cuando adoptan su forma humana pero guardan su distancia, respetando el territorio de cada una porque son bastante agresivas.
- Estos seres tienen un respeto grande por sus seres queridos porque nunca atacan a sus familiares. Únicamente lo hacen si alguno de ellos revela el secreto de su existencia a otras personas del pueblo.
- Una de las actividades favoritas de estas entidades demoníacas es chupar la sangre de bebés y niños, para ellas la sangre de los jóvenes e inocentes es más deliciosa. Generalmente la aparición de las tlahuelpuchis ocurre entre las doce de la noche y las cuatro de la mañana.
Para ahuyentarlas, debe colocarse un espejo cerca de la puerta de la habitación o poner una cubeta de agua limpia en la entrada de la casa es un excelente repelente contra su presencia.
Para que no se lleven a los bebés de sus cunas, se coloca una caja de agujas, un cuchillo o unas tijeras abiertas debajo del colchón, pues se sabe que estas brujas detestan el metal.
¿Te dio miedo, verdad? Esta es solo una de las tantas leyendas que se cuentan en todo México. Es una buena idea visitar Tlaxcala y comprobar si es real la existencia de las tlahuelpuchis.
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