México posee una inmensa riqueza en recursos naturales y en cuestión de animales no se queda atrás. De norte a sur este país posee ejemplares de animales de todos los tipos; en esta ocasión toca el turno a un animalito que es el protagonista de varios cuentos infantiles: El lobo.

Lobo Mexicano y su historia 

El lobo Mexicano es la subespecie más pequeña del lobo gris; su territorio se expande desde el sur de los Estados Unidos hasta parte de Chihuahua, Nuevo León, Zacatecas, Sonora. Puede llegar a medir entre 130 a 180 cm, su color es café grisáceo y amarillento.  Durante la década de los 50´s fue cazado casi al borde de la extinción ya que los ganaderos argumentaban que sus animales eran atacados constantemente por los lobos.

Su recuperación

Debido a su cacería excesiva, el lobo mexicano estuvo al borde de la extinción en los años 70´s pero debido a su importancia en el ecosistema, ambas naciones unieron esfuerzos para proteger al lobo. El programa avanzó de manera tan exitosa que 2014 nació la primer camada de una pareja que fue reinsertada en la vida silvestre
Aunque esta maravillosa especie sigue en peligro de extinción, el programa ha sido muy exitoso y se espera que los bosques del norte de México sean repoblados con estos bellos animales.

El hashtag #ProtegeALaManada se creo con el fin de visibilizar y concientizar el cuidado y conservación del Lobo Mexicano, además de que también se busca recaudar fondos y buscar apoyos.

Si de manjares exóticos se trata México «se pinta solo» y es que lo que sería despreciado por su aspecto y condición, los mexicanos le dimos nuestro toque y sabor haciendo un manjar digno de los dioses. El huitlacoche es unas de esas comidas que pocos comprenden pero que muchos aman y es que este parásito es un clásico en las cocinas mexicanas.

Huitlacoche

El huitlacoche o cuitlacohe es un hongo parásito que llega a infectar el maíz especialmente en la temporada de lluvias, en diversos países que son productores de maíz se le considera una plaga más, mientras que en México es un manjar.  Muchos la han llamado la «trufa mexicana» debido a su color, su especie y a que crece en un ambiente de humedad.

Propiedades

Aunque no lo parezca, el huitlacoche además de ser delicioso tiene un alto valor nutricional pues en primera instancia es bajo en grasa y rico en fibra, los ácidos grasos esenciales omega 3 y omega 6 , antioxidantes y lo mejor es que contiene una gran cantidad de aminoácidos esenciales.

La comida de los dioses

Su sabor tan exótico como su origen, ha hecho que mexicanos y extranjeros se maravillen  por su sabor,  y ya sea en guisos sencillos o en recetas de alta cocina, el huitlacoche nunca dejará de maravillarnos.

El mexicano sabe como divertirse y vivir al máximo cada momento de la vida; es alegre por naturaleza y aunque la situación sea dura siempre trata de tomarla con ese humor que lo caracteriza. Sin embargo, esta pandemia cambió completamente el mundo como lo conocía y aunque intento ponerle la mejor cara hubieron cosas que se convirtieron en recuerdos tales como:

Hacerte un taco de sal o salsa en la tortillería 

Debido a la pandemia por COVID 19 lejanos quedaron los días en los que al ir a la tortillería se nos permitía tomar una tortilla, espolvorearle sal o ponerle una buena cucharada de salsa. Sencillamente era un manjar que tardaremos mucho tiempo en volver a probar.

Mordisquear un bolillo saliendo de la panadería

Ya sea al ir por el pan del desayuno o por el de la cena, era un placer el darle una buena mordida a un bolillito recién salido del horno. Ahora por la pandemia debemos usar mascarilla casi en todo momento por lo que se nos hace sumamente difícil el mordisquear el pan antes de llegar a casa.

Gritar para pedir nuestros tacos 

«Para mi van a ser 4 de suadero, tres de pastor y 2 de longaniza con todo por favor»  Nada se compara a la sensación de comer unos deliciosos tacos y en el proceso «cotorrear» con el taquero. Por la pandemia, ahora podemos ordenarlos a través del delivery pero sencillamente no es lo mismo.

Toques en la cantina 

Solo los mexicanos pagamos para que nos den pequeñas descargas eléctricas y es que los toques de cantina eran la combinación perfecta de alcohol, adrenalina, amigos y buenos momentos. Por la pandemia, ahora se tiene que poner en práctica el distanciamiento social haciendo de los toques algo casi imposible.

Viajar 

Algo que seguramente todos los mexicanos – y extranjeros-  extrañamos es viajar. Caminar por un Pueblo Mágico, broncearse en una playa paradisiaca, acampar en la montaña, aprender en sus museos, cantar con el mariachi y muchas tantas otras cosas.

Esperemos que poco a poco las cosas que conocíamos vuelvan a la normalidad…

No es necesario viajar hasta el África para poder contemplar la belleza y majestuosidad de los grandes felinos, en México con su importante biodiversidad puede presumir que cuenta con varias especies de grandes felinos, te decimos cuales son.

Tigrillo 

Este felino suele confundirse con el ocelote pero el tigrillo es de menor tamaño. Puede encontrarse en los estados del suroeste del país, especialmente en Oaxaca, Guerrero y Chiapas. Lamentablemente este felino se encuentra en peligro de extinción gracias al tráfico de especies y pieles o por la cacería ilegal.

Puma 

Este gran felino es uno de los más imponentes y hermosos del mundo y lo mejor es que se pueden encontrar en México desde el norte hasta el sur. Este animal es muy adaptable a todo tipo de climas y ecosistemas pues ha sido encontrado desde las zonas más áridas hasta bosques. Los pumas están en peligro de extinción debido a la cacería ilegal, el tráfico de especies y la deforestación de su hábitat natural para usar tierras para la siembra o el ganado.

Jaguar

Y por último y no menos importante, este hermoso felino que habitaba gran parte de México – tristemente ha perdido el 40% de su distribución en el país- es uno de los más importantes, ya que tenía un significado muy especial entre los pueblos precolombinos como los mexicas, olmecas y por supuesto los mayas quienes lo reconocían como símbolo de poder.

“Quien no conoce el Salón Los Ángeles, no conoce México”, dicta la icónica frase del más antiguo salón de baile de la Ciudad de México y el cual podría estar a unas semanas de ser derrumbado por la crisis económica que atraviesa consecuencia de la suspensión de actividades por la COVID-19. Seguir leyendo Salón Los Ángeles podría desaparecer en octubre →

En en el norte de México surgió una bebida que según se cuenta es sólo para los que son más valientes.  Su nombre proviene proviene por el lugar en el que nació, el municipio de Bacanora  que es uno de los 72 municipios que comprenden el extenso estado de Sonora.

Esta célebre bebida proviene gracias a la destilación del agave, por lo que podría decirse que la bacanora es la prima norteña de bebidas tan icónicas como el mezcal, el tequila y la raicilla. La principal diferencia de la bacanora y  sus primos de Jalisco y Oaxaca es la especie del agave, ya que para obtener esta bebida se utiliza el denominado angustifolia hawque es también conocido como Yaquiana.

La bacanora tiene aproximadamente entre 38 y 55 grados de alcohol lo que la hace una bebida bastante fuerte, ideal para aquellos que no le tienen miedo a nada.

Un placer prohibido 

¿Sabías que la bacanora estuvo prohibida durante casi setenta años? Así es, pues por allá de 1915 el entonces gobernador del estado de Sonora, Plutarco Elías Calles expidió una ley en la que se prohibía terminantemente producir, importar o vender cualquier tipo de bebida alcohólica por lo que la bacanora sufrió las consecuencias. Sin embargo, «lo prohibido es lo más rico» y esta bebida espirituosa fue producida y vendida «por debajo del agua» haciendo que los productores de bacanora se instalaran en lo más profundo de la sierra para seguir haciendo esta deliciosa bebida.
No fue hasta 1992 que su producción se regularizó y se propuso su elaboración como una actividad económica que ayudaría al desarrollo económico del estado. En el año 2000, el IMPI (Instituto Mexicano de la Propiedad) les dio a 34 municipios de Sonora –  Obviamente al célebre Bacanora – el reconocimiento de denominación de origen.

Ya sea sola o en un rico cóctel, atrévete a preparar esta deliciosa bebida que nació en las áridas regiones del norte.

Para nadie es un secreto que México tiene una exhorbitante diversidad de seres vivos, especialmente en vegetación, pues tenemos desde el colosal Árbol del Tule hasta la colorida flor de cempasúchil.

Te presentamos las flores endémicas más hermosas y representativas de este país y que seguramente has visto en fiestas importantes o simplemente en algún jardín.

Flor de Nochebuena o Poinsettia 

Está bella flor se encuentra presente en todas partes durante las épocas decembrinas y no es para menos pues por su peculiar forma de estrella y su característico color rojo brillante alegran cualquier día gris de invierno.

En el extranjero especialmente en Estados Unidos de América se le conoce como Poinsettia ya que en 1821 el diplomático de aquel entonces Joel Roberts Poinsett en un viaje a México, visitó Taxco y quedó enamorado de las flores que adornaban las calles del pueblo minero. Como era un amante de las plantas, compró varias plantas y las llevo a su país para que pudieran admirarla; no obstante siempre se reconoció a esta flor de origen mexicano.
Existen cerca de 300 variedades de esta flor y hay en varios colores, pero las mas populares son las de color rojo y blanco.

Dalia 

Es considerada la flor representativa de México, de las 43 especies que existen 35 son originarias del país. Esta flor era muy apreciada desde tiempos precolombinos pues era usada para adornar casas y templos además de que con sus pétalos fabricaban tinturas para teñir telas.  La flor de camote o xicamiti como se le conocía también tiene propiedades curativas y era utilizada en la cocina.

Flor de Cempasúchil

Esta flor con su distintivo aroma no puede faltar en los altares del Día de Muertos, la flor de cempasúchil o flor de los cuatrocientos pétalos tiene una suma importancia cultural ya que se cree que el olor atrae y guía a los muertos hacia los altares que cada año le dedican sus familiares.

Cuando hablamos de razas caninas mexicanas seguramente se te vienen a la mente los tiernos Chihuahua o el mítico Xoloitzcuintle, pero no sabias que existe una tercera raza que es de las menos conocidas, pero no por ello menos importante. El Calupoh es una majestuosa raza híbrida entre perro y lobo que desde 1999 es reconocida por la FCI (Federation Cynologique Internationale) como una raza orgullosamente mexicana.

Aunque se hizo famoso a finales de los 90´s, el Calupoh lleva en nuestro país desde la época prehispánica pues se han encontrado restos de estos animales en diferentes sitios arqueológicos como la Plaza Mayor, la Piramide de la Luna y el Templo de Quetzalcoatl.

¿Cómo es el Calupoh? 

Son una raza de perros grandes pues los machos llegan a medir entre 62 y 75 cm de altura y las hembras un poco más pequeñas al alcanzar los 58 y 70 centímetros. Poseen un pelaje muy grueso con un penetrante color negro ahumado y unos pequeños ojos color ámbar.
El Calupoh puede intimidar porque parece un lobo feroz a simple vista pero es un perro muy noble y leal, ideal para convivir en familias con niños pequeños; el Calupoh es perfecto para vivir en el campo pues se adapta muy fácilmente a todo tipo de tareas como el pastoreo.  A pesar de ser un perrito muy servicial debemos recordar que tiene la misma sangre que sus parientes los lobos salvajes por lo que a veces es un tanto tímido y reservado, sobre todo en presencia de intrusos y extraños.

¡Quiero uno! 

Si te encantaría tener un hermoso Calupoh en casa te tenemos buenas noticias ya que en Ciudades de Baja California Norte y Morelos existen criaderos especializados. Recuerda que si decides ser el dueño de una mascota tienes que ser responsable y darle mucho amor.

Aguerridos, disciplinados, religiosos y temidos por todos, así eran los mexicas – aunque son coloquialmente conocidos como aztecas- .  Hace muchos siglos atrás, existieron diversos pueblos con diferentes costumbres y tradiciones a lo largo y ancho de lo que es hoy este hermoso país.  Esos pueblos nos heredaron una gran cierta influencia en nuestro idioma, gastronomía, cultura y hasta religión.
De todos esos maravillosos pueblos, los mexicas siempre se diferenciaron de los demás y que gracias a su carácter bélico y su excelente organización militar se convirtieron en uno de los imperios más grandes de la historia de Mesoamerica.

1. Conocían el centro del universo 

Si has caminado por las calles del Centro Histórico sabrás que uno de los mayores atractivos turísticos que hay es el Templo Mayor, pues bien, este lugar era demasiado importante para los mexicas pues lo consideraban nada más y nada menos que «El centro del universo», por lo mismo no podía cambiarse de lugar y al querer agrandarlo, se construía un edificio sobre otro – lo que conocemos como «pirámides»- , además de que no debían descuidar las características principales que eran dos capillas en la cúspide.

La próxima vez que vayas al Centro Histórico de la Ciudad de México, no olvides visitar y tomarte una foto en «El Centro del Universo».

2. Castigaban ferozmente la ebriedad 

Si te encanta salir de la fiesta con la «bebida caminera» en mano y caminar bastante borracho con tus amigos – igual o más pasados de copas que tú – agradece con todo tu corazón que no nacieron en los tiempos de los mexicas.
Los mexicas tenían estrictamente prohibido el consumo de alcohol hasta que cumplieran los 52 años – eso si, con moderación- y sólo en fiestas especiales y ceremonias.
Si algún plebeyo era sorprendido borracho vagando por las calles los rapaban públicamente en algún mercado y saqueaban su casa, y si lo encontraban por segunda vez su castigo era la muerte. Los nobles no tenían mejor suerte ya que si los pillaban aunque se una sola vez pasados de copas, eran sentenciados a la pena de muerte.

3. Las marcadas clases sociales 

Los mexicas tenían una sociedad compuesta por diversos clanes que iban en un estricto orden jerárquico a los que se les llamaba calpullis.  En primer lugar estaban los Pillis que eran los nobles y la clase alta quienes eran los únicos que podían atender asuntos de gobierno y sacerdocio, después estaban los Macehuales que eran los plebeyos y el pueblo en general y que se dedicaban a la caza, agricultura, pesca, hacer artesanías. En el último lugar se encontraban los Mayeques, que eran los sirvientes de los Pillis y venían de los pueblos conquistados.

4. Sus sorprendentes hábitos de higiene

Si algo maravilló a los conquistadores españoles fueron los hábitos de higiene que acostumbraban los mexicas.  Este asombroso pueblo llevaba la limpieza muy en serio, ya que desde niños acostumbraban a lavar sus dientes con ceniza de tortilla, además de que se bañaban diariamente en lagos y ríos o en temazcales – los cuales son una experiencia única que no puedes perderte -. Con esto se mantenían limpios y saludables.

5. El origen del pozole 

Todos esperamos con ansías el «jueves pozolero» y no es para menos, ya que es un platillo delicioso y muy representativo de la gastronomía mexicana. Sin embargo, su origen es bastante sangriento. Los mexicas  se preparaban un “pozole» como ofrenda al dios Xipe Tótec, el cual contenía maíz cacahuazintle y el ingrediente principal era nada más y nada menos que la cabeza o muslo de algún desafortunado prisionero de guerra. Los sacrificios humanos y actos de canibalismo eran reservados para los rituales y ceremonias a sus deidades. Posteriormente, con la llegada de los Españoles, los frailes evangelizadores convencieron para cambiar la carne humana por una cabeza de cerdo y así se fue alterando el platillo hasta llegar al pozole que todos conocemos.