El proyecto chino conocido como Qiyi City Forest Garden, que buscaba una comunión entre la naturaleza y el ser humano a través de un Bosque Vertical, se ha convertido en una auténtica pesadilla para sus habitantes.
Debido a las exigencias en el mercado inmobiliario que día con día trabaja en buscar una mayor sostenibilidad y crear conciencia social con el medio ambiente, a través de edificios con energías renovables, instalaciones eléctricas más eficientes, así como mayor vegetación, se busca conseguir que todas las construcciones alcance una calificación «verde».
Te podría interesar: Peña del Cuervo: el lugar para tu próxima instagrameable
Sin duda alguna, dicho cambio ha traído consigo grandes beneficios no sólo para el medio ambiente, también para las personas; sin embargo, también ha tenido consecuencias poco agradables para los habitantes de dichas edificaciones y no siempre termina siendo una ventaja como se esperaba.
Es el caso del conjunto residencial construido en Chengdu, en China, mismo que fue presentado como un proyecto innovador y nombrado el Mayor Bosque Vertical de esa nación; desafortunadamente, el resultado no ha sido el esperado y lejos de traer beneficios para sus habitantes, se ha convertido en una auténtica pesadilla.
Te podría interesar: Cuevas de la Amistad, para una escapada de fin de semana
Un bosque vertical poco amigable
El complejo Qiyi City Forest Garden comenzó sus funciones 2016 y su principal atractivo eran sus enormes áreas verdes, vegetación y la promesa de vivir en una impresionante jungla urbana a lo largo de 36 pisos con áreas comunes.
A principios de 2020 inició la venta de los departamentos y para el mes de abril, la inmobiliaria ya había conseguido vender 826, lo que de inicio representaba un éxito rotundo para el proyecto conocido como Bosque Vertical.
Con el transcurrir de los meses se lograron vender más viviendas; pero no todo fue miel sobre hojuelas, ya que pocos inquilinos se mudaron al edificio, que en su mayoría lucía vacío debido a dos razones:
La primera, que la mayoría de dueños son inversores inmobiliarios y, la segunda, porque las personas que ya habitan el edificio se quejan de la gran cantidad de mosquitos y plagas, dio a conocer el diario Global Times.
Te podría interesar: Hotel Nirvana: para encontrar la paz interior en San Miguel de Allende
Esta situación ha dejado en el abandono total muchas áreas verdes, lo que ha ocasionado la proliferación de múltiples plagas que se han convertido en un verdadero martirio para sus habitantes, quienes día a día tienen que batallar con esta situación.
De acuerdo con los inquilinos, «¡es como vivir en plena selva! Y aunque te sientes atrapado por la naturaleza, es imposible vivir al estar todo el día pendiente de los mosquitos«.
El proyecto Qiyi City Forest Garden deja una gran enseñanza y aprendizaje para el sector inmobiliario: el papel que juega el ser humano con la naturaleza y su interacción con la misma, así como el tipo de vegetación que debe incluirse y cuánta cantidad, para evitar que se convierta en un problema mayor.