Mirage Gstaad es una cabaña en verdad poco común. Con su superficie —muros exteriores— de relucientes espejos, refleja el hermoso paisaje que sólo Suiza te puede ofrecer.
Esta cabaña nació gracias al cineasta Doug Aitken, a quien se le ocurrió edificar una pequeña finca inspirada en el Oeste de su natal Estados Unidos, pero conjugada con el bello paisaje suizo. Por eso la recubrió de espejos, para que se mimetizara con los alrededores y la ilusión óptica cautivara a los visitantes.
Podría interesarte: Nevada de chocolate en Suiza
‘Mirage Gstaad’ o un espejismo en los Alpes suizos, una instalación del artista estadounidense Doug Aitken que está cubierta completamente de espejos.
— Lorena G. Díaz (@Lorenagdiaz) March 10, 2019
La obra forma parte de un festival de arte efímero y solo estará disponible durante los próximos dos años. pic.twitter.com/9hs69MFdEg
Se puede acceder a Mirage Gstaad únicamente a pie —pues está prohibido estacionarse cerca de la propiedad—, luego de una caminata que puede durar entre 15 y 20 minutos, partiendo de las estaciones de tren de Gruben o Schönrie.
El camino hasta este sitio es una experiencia única; es el pretexto perfecto para practicar senderismo, llenar los pulmones de aire puro y disfrutar del inigualable paisaje de las montañas de Suiza.
Interior de Mirage Gstaad
Si Mirage Gstaad por fuera es impresionante, por dentro no te decepcionará: cuenta también con espejos que crean un efecto caleidoscópico inigualable.
Tristemente, la exhibición de la cabaña Mirage Gstaad es temporal, es decir, permanece abierta al público desde finales de 2019 y concluirá este año.