El poeta Octavio Paz lo sabía y lo escribió: la cocina es la manera más segura de acercarse a un pueblo. Y los viajeros de América Latina le dan la razón: 59% de los viajeros latinoamericanos reconocieron que visitan México para probar su gastronomía, de acuerdo con una encuesta de Booking.com.
En espera de que las condiciones de emergencia sanitaria actual lo permitan, qué te parece si vamos alistando las maletas y realizamos un breve recorrido por tres de los Pueblos Mágicos de nuestro país donde los visitantes de esa gran comunidad hispanoparlante conocida como Latinoamérica, pueden conocer los inagotables paraísos de la cocina nacional.
Tequila
Antes de pensar en el destilado de agave más famoso en el mundo, te proponemos darte un banquete con algunos de los platillos más conocidos de este pueblo de Jalisco, que incluso se han extendido hasta el mismo centro de la república.
Comencemos con el siempre anhelado Pozole, un caldo de maíz en grano, acompañado con carne de cerdo, pollo o atún (sí, hay quienes lo prefieren así), sazonado con salsa verde o roja.
El consomé de salsa de tomate con carne de chivo o de res, cocinada en hornos bajo tierra pre-calentado con leña, es la llamada Birria de Chivo o Ternera, es nuestra segunda propuesta.
Después, una exquisita y singular Torta Ahogada, que consiste en una torta tradicional hecha con bolillo o birote abierto a la mitad, preparado con carnitas de cerdo refritas en cazo de cobre y luego bañada en salsa de tomate con toques de orégano.
Para el postre, las jericallas son un obligado típico que está presente en prácticamente cualquier restaurante, tienda o puestito de la ciudad.
Izamal
Conocida como la Ciudad de los cerros, se encuentra a 72 km al oriente de Mérida. Allí te recibirán sus inconfundibles fachadas pintada de amarillo y blanco por decisión de autoridades y vecinos. Este bello poblado colonial se fundó a a mediados del siglo XVI sobre los vestigios de una antigua ciudad maya. Como en Mérida, podrás ver calesas tiradas por caballos en sus plazas y parques.
En Izamal puedes encontrar los platillos más típicos de la región: Cochinita pibil, Relleno blanco, Papak-tsul, Salbutes, Pescado en Tikin-Xic, Sopa de lima, Poc chuc, Panuchos y Huevos motuleños, entre otras muchas delicias.
Que ganas de pasear por el convento de Izamal 🤩 que opinas @edificiosmayas ?
📍Izamal Yucatán México
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Zacatlán de las manzanas
La niebla y el frío comienzan en los alrededores de Zacatlán, pero no terminan al llegar al centro de la ciudad. De hecho, las nubes invaden esta comunidad poblana desde su entrada hasta su Centro Histórico. Pero no te desanimes, pues esta condición es más bien el telón de un escenario que te hará querer regresa todas las veces.
Antes de probar sus gastronomía basada mucho más que en las manzanas —su nombre se debe a que es un gran productor de esta fruta, no porque solo coman eso—, puedes visitar la barranca de Los Jilgueros, donde recibirás uno de los panoramas más espectaculares de la Sierra poblana.
Y ya entrando en materia, los alimentos típicos de Zacatlán son el conejo encacahuatado o enchilado con chiltepín, el guiso «pichón del campesino” o el mole de olla (o mole aguado).
Los dulces juegan un papel principal. No olvides probar el jamoncillo o las conservas de manzana. Si lo tuyo es el pan, las burras, las picadas, morelianas, las puñaladas o los almohadones te sorprenderán.
Haz espacio en tu maleta para un vino de manzana, de blueberry, anís o avellana, además de una crema de piñón, un anís con toronjil o una de las mundialmente famosas sidra y refrescos de manzana.
El pilón
No es un Pueblo Mágico, pero si decides visitar la capital de México, no debes olvidar los tacos al pastor, una guajolota (que no es otra cosa que un bolillo con tamal, pero sabe exquisita) o la torta de chilaquiles.
Y si decides ir aún más a lo profundo, visita el Centro Histórico, donde podrás alojarte en Hostal Regina Down Town, un enclave de decoración colonial y moderna en ese epicentro de tradiciones de todos los tiempos que es el centro de la Ciudad de México.