El Centro Histórico de la Ciudad de México siempre tiene una leyenda que revelar, ahora se manifiesta con la casa maldita de República de Uruguay, que antiguamente perteneció a un noble español conocido como don Juan Manuel Solórzano, de quien se dice, aún se manifiesta en la entrada de este edificio de arquitectura colonial.
Se trataba de un hombre que gozaba de buena fortuna, casado con una bellísima mujer, con quien deseaba procrear a un varón, desafortunadamente jamás llegó a tener hijos, hecho que le produjo una gran frustración e infelicidad, al grado de tomar la decisión de internarse en un convento franciscano.
Para entregarse por completo a la vida y obra de Dios, dejó sus negocios en manos de su sobrino, así como la que posteriormente sería conocida como la casa maldita de República de Uruguay. Desafortunadamente el hábito no le trajo paz a don Juan Manuel Solórzano, pues el encierro le produjo ansiedad y esto derivó en pensamientos alimentados por los celos, pues creía fielmente que su esposa lo engañaba con su sobrino.
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La casa de uno de los primeros asesinos seriales de la Nv España. Todas las noches a las 11 Don Juan Manuel Solórzano asesinaba a la primera persona que cruzaba la calle a las 11 de la noche.Hizo un pacto con el demonio para descubrir al hombre que visitaba a su mujer. Uruguay 94 pic.twitter.com/XfbkUmDkNP
— Tlatoani_Cuauhtemoc (@Cuauhtemoc_1521) April 10, 2018
¿A qué hora sucede todo en la casa maldita de República de Uruguay?
Víctima de la locura, cuentan que terminó por hacer un pacto con el mismito Diablo, para que le revelara el nombre del supuesto amante de su mujer. Este consistía en que el humano debía asesinar al primer hombre que cruzara frente a su casa, en punto de las 11 de la noche. Así comenzó la leyenda de la casa maldita de República de Uruguay.
Cuando llegó el momento, don Juan Manuel Solórzano preguntaba a su víctima la hora y de acuerdo con las órdenes que le dio Lucifer, tenía que contestar: “Dichoso el que conoce la hora de su muerte” y, acto seguido, hundir el puñal hasta arrancarle la vida. Evento que ocurría cada noche, el mismo que llevó a señalar su hogar como la casa maldita de República de Uruguay.
¿Cómo terminó este hombre?
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Paseando por las calles del centro histórico de CDMX,la casa de Don Juan Manuel de Solorzano y su conocida leyenda. @AmorxMexico1 @AmorXMexico2 @andregrupo @Cuauhtemoc_1521 @gcerveravalee @GLupeVictoria @pabloyeli99 @SombrillaTour @centroDF @CdmxC pic.twitter.com/XAeDSmqYDr
— Gadian (@GADIAN84) May 13, 2018
Finalmente la culpa llegó, así que confesó todo ante la iglesia. Por tratarse de un hombre poderoso, el padre lo invitó a rezar todos los días al pie de la horca y así lo hizo con tal fervor, que se podía escuchar con claridad. Al tercer día de cumplir su penitencia, amaneció colgado. Algunos aseguran que fue el mismísimo demonio quien lo hizo, por no continuar con el trato.
Actualmente la leyenda dice que en punto de las 11 de la noche aparece el fantasma de aquel hombre atormentado, justo en la entrada del que fuera su morada, la casa maldita de República de Uruguay, en el número 90. Si pasas por ahí y alguien te pregunta qué hora es, jamás respondas y sigue de largo, porque aquellos que responden escuchan la frase: “Dichoso aquel que sabe la hora de su muerte”. El resto, ya lo conoces.
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