Si vas andar de curioso por el Pueblo Mágico de Chignahuapan, en Puebla, entre esferas y sitios emblemáticos, te proponemos una vuelta por Aquixtla. Sólo 30 minutos es el tiempo que une a estos dos municipios poblanos, donde las maravillas de su tierra sobresalen por su río y hermosas cascadas.
Al entrar hasta su centro, el pequeño pueblo serrano de Aquixtla te invita a visitar su Parroquia de San Juan Evangelista, que deja al descubierto su decoración en pura talavera. Ya que andas de paso, admira los bellos portales del Palacio Municipal y las fachadas coloridas de los edificios circundantes.
Pero Aquixtla tiene más atractivos, los cuales se hallan en las inmediaciones, donde la naturaleza hace de las suyas con extraordinarias cascadas, como El Salto de Tepexcanal y Popocaya.
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Sumérgete en Aquixtla
El Salto de Tepexcanal se localiza a 10 minutos de la cabecera municipal de Aquixtla, desde ahí puedes contratar los servicios de touroperadores y guías especializados que te llevan hasta su caída de aproximadamente 70 metros de altura.
Esta cascada es ideal para practicar rappel y para nadar en sus pozas de agua limpia y cristalina, ya que los arroyos de la zona se conservan libres de descargas de aguas residuales. Además, sus senderos invitan a hacer recorridos en familia, mientras se respira aire puro que regala su bosque.
Otro maravilloso punto de Aquixtla es su río Cuautolanico, que presume un azul turquesa deseable para zambullirse; cuenta con 5 metros de ancho, rodeado de vegetación y fauna local como renacuajos, ranas, serpientes, mapaches y tejones.
Por último, a 12 minutos de Aquixtla encontramos la cascada Popocaya, con una caída de 10 metros, que también invita a disfrutar de la aventura a través de descensos a rappel, además de momentos de relajación mientras se observan la flora y fauna de esta zona.
