Tolimán, un lugar de memoria y tradición en Querétaro

Tolimán en Querétaro
Tolimán en Querétaro

Tolimán, ese encantador municipio ubicado en el corazón del estado de Querétaro, esconde una riqueza cultural y culinaria que vale la pena conocer. Con sus coordenadas entre 20° 45´ y 21° 04´ de latitud Norte, y entre 99° 47´ y 100° 05´de longitud Oeste, y altitudes que van desde los 1,350 hasta los 2,740 metros sobre el nivel del mar, este lugar tiene mucho que ofrecer.

Limitando al norte con Peñamiller y el estado de Guanajuato, al oeste con Colón y Guanajuato, al sur con Cadereyta de Montes, Ezequiel Montes y Colón, y al este con Peñamiller y Cadereyta de Montes, Tolimán tiene una ubicación privilegiada y una historia fascinante.

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Fundado en el siglo XVI bajo el nombre de San Pedro Tolimán, este municipio presenció el encuentro entre los españoles y los indígenas Otomíes nahuatlizados procedentes de Xilotepec. Desde entonces, Tolimán ha pasado por diversas etapas, como la de convento de San Pedro Tolimán en 1538, corregiduría, república de naturales, misión, parroquia, pueblo, villa y, finalmente, ciudad en 1882.

La influencia española se refleja en la traza de la ciudad, con su plaza principal, templo, atrio, cementerio y las casas destinadas a los españoles. La convivencia entre españoles e indígenas creó una simbiosis cultural única, donde se hablaba tanto el otomí como el español, mientras que las misas se oficiaban en latín.

En cuanto a su geografía, Tolimán es privilegiado con un entorno natural encantador. Sus tierras fértiles han impulsado la agricultura, especialmente en la fruticultura, donde se destacan cultivos de guayaba, aguacate, limón, durazno, piñón y nuez. Además, la ganadería tiene un lugar importante en el municipio, con la cría de caprinos, bovinos, ovinos, porcinos y equinos.

tolimán
Tolimán

Pero, sin duda, uno de los mayores tesoros de Tolimán se encuentra en su gastronomía. Las cocineras tradicionales, herederas de técnicas culinarias ancestrales, han sabido preservar la esencia de la cocina otomí y deleitar a propios y extraños con sus sabores únicos.

Entre los platillos más representativos se encuentran los garbanzos amarillos, el mole estilo Tolimán y las tortillas de colores. Pero no te puedes perder la diversidad de platillos elaborados con nopales, quelites, verdolagas y flores, que te transportarán a un mundo de aromas y sabores inolvidables.

Tolimán también es reconocido por su producción artesanal. Los habitantes del municipio son expertos en la elaboración de tejidos, bordados, alfarería y tallado en madera. Los visitantes pueden adquirir piezas únicas y apreciar el talento y la creatividad de los artesanos locales.

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