En Guanajuato se da una planta conocida como chilcuague, cuya raíz tiene diferentes usos, uno es la limpieza profunda del paladar y otros son medicinales y culinarios.
El chilcuague es una planta endémica de México que también es conocida como raíz de oro.
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De acuerdo con una investigación realizada en 2018 por la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), encabezada por la estudiante Paola Estefanía García Badillo, esta planta ayuda a la formación de vasos sanguíneos nuevos.
El análisis en cuestión se intitula «Estudio in vivo del efecto angiogénico del extracto etanólico y de la afinina obtenidos a partir de raíces de chilcuague, un recurso vegetal».
Chilcuague, nobles propiedades
En el chilcuague se sintetizan compuestos de gran valor farmacológico denominados alcamidas, hormonas vegetales capaces de alterar diferentes aspectos de la vida de las plantas. Se usa como insecticida natural, condimento para alimentos y como remedio para el dolor.
El chilcuague crece de forma silvestre en 18 comunidades del norte de Guanajuato y se emplea como analgésico local o bien como antibiótico, pues su raíz contiene muchas propiedades que ayudan a los sistemas inmunológico y digestivo.
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Su nombre proviene de la lengua náhuatl y significa «chile de víbora«; también se conoce como chilmetal o chile de mecate. También se usa como condimento en salsas, frijoles, nopales y demás platillos de la región.
Con su raíz se infusiona un destilado de agave blanco que abre las papilas gustativas, produciendo una sensación única en lengua y paladar.
Chivo tapiado, garbanzos en amarillo, frijoles y quelites son algunos de los platillos que se preparan con esta planta mexicana.
