En el pueblo de Huitzilac se encuentran las Lagunas de Zempoala, un Área Natural Protegida que se ubica entre los municipios de Ocuilan de Arteaga, el Estado de México y Morelos. Fue declarado Parque Nacional el 21 de noviembre de 1936.
Las Lagunas de Zempoala son un paraíso natural con una superficie de 4 mil 790 hectáreas y está conformado por siete lagunas como: Compila, Tanoatihua, Seca, Prieta, Ocoyotongo, Quila y Hueyapan.
De las siete que conforman las Lagunas de Zempoala, únicamente tres son permanentes y las otras son de forma intermitente, ya que dependen de las lluvias. En torno a estas lagunas existe una leyenda náhuatl que a continuación te contaremos:
En el Pueblo Huitzilac, entre sus habitantes existía una pequeña niña que destacaba por su gran belleza. Sus ojos eran oscuros y cristalinos como la obsidiana, su piel era tersa y su sonrisa aperlada. Su nombre era Zempoatl.
Te podría interesar: Lugares para ir de pesca cerca de la CDMX
Zempoatl jamás conoció a su madre ya que murió mientras estaba en labor de parto; sin embargo, siempre contó con el amor y el cariño de su padre y de sus seis hermanos.
Un día la hermosa niña y sus seis hermanos jugaban a la orilla de un río, cuando de pronto un apuesto joven la vio y quedó completamente enamorado de ella. El joven vestía un atuendo de los tlahuicas (una antigua cultura de la región).
El joven le preguntó a la niña qué dirección debía tomar para encontrar el poblado del ajusto ya que debía ir a entregar un encargo. A lo que Zempoatl respondió: «Vas por el camino correcto buen mozo. El lugar que buscas está tras los mentes que tienes frente a tu vista».
El joven asintió con la cabeza, agradeció las indicaciones y al hacerlo se percató de la inmensa belleza de Zempoatl. Ambos se despidieron y dejaron al destino su suerte.
Con el paso de los años, ella se convirtió en una hermosa mujer que era asediada por un sinnúmero de pretendientes. Ante el padre se presentaban hombres de toda la región que buscaban desposarla; sin embargo, el corazón de su hija quedó prendado del joven tlahuica.
Te podría interesar: Tlayacapan, Pueblo Mágico de Morelos
Una tarde, cuando Zempoatl regresaba del río con un par de cántaros a cuestas, se percató que hacia ella se enfilaba el mismo hombre del que se enamoró años atrás. Al quedar de frente se reconocieron, ambos se abrazaron de forma efusiva. Instantes después, él la empujó de forma brusca y le dijo: «mujer, no puedo hacerte daño. Yo ya no soy libre, me he casado porque pensé que no nos volveríamos a ver».
El escuchar dichas palabras, Zempoatl sintió que su corazón se desmoronaba mientras el hombre que amaba proseguía con su camino. Ante tal desilusión ella quedó sumergida en una profunda tristeza, días después enfermó y murió.
Tras su muerte, la familia de la doncella rogó a los dioses que la regresaran a la vida, desafortunadamente sus suplicas no rindieron frutos. El padre y los hermanos de Zempoatl lloraron desconsolados durante día y noche, hasta que sus lagrimas formaron varias lagunas, que hoy son conocidas como las Lagunas de Zempoala.
Hoy en día las Lagunas de Zempoala son frecuentadas por turistas nacionales y extranjeros que gustan de la naturaleza, ya que son una excelente opción para dejar atrás la rutina y relajarse en armonía con el majestuoso entorno, donde además se pueden disfrutar de unas delicias de la región en su área de comida.
Recuerda que nos encontramos en contingencia sanitaria, por lo que se recomienda permanecer en casa hasta que las condiciones sean favorables para volver a salir y disfrutar de las Lagunas de Zempoala y demás destinos de México y el mundo. ¡Cuídate y evita contagios!