Las playas de Ciudad del Carmen enloquecen los sentidos; también su peculiar arquitectura de tipo europeo hace que la isla sea un verdadero paraíso.
Se localiza a 209 kilómetros de la capital de Campeche, por la parte norte de la Laguna de Términos, entre la península del Palmar y la Punta de Xicalango.
En épocas prehispánicas, Ciudad del Carmen fue tomada por el grupo maya Xiu, para convertirla en un centro ceremonial donde se rendía culto a la diosa de la fertilidad Ixchel. Un pasaje mesoamericano que relata el libroPopol-Vuh.
Con la llegada de los españoles, Ciudad del Carmen tuvo un auge comercial muy importante, pero esto le valió convertirse en un gran atractivo para los piratas.
Estos personajes de los mares que eran apoyados por la corona inglesa, instalaron su base aquí, donde realizaban prácticas de contrabando de maderas preciosas y palo de tinte, del cual se extraen colorantes.
Por esa razón abundan los mitos y leyendas sobre el tema.
Además de su inagotable historia, Ciudad del Carmen siempre está presentable, presumiendo un outfit lleno de tonalidades que de inmediato encantan al visitante. Cada muro colonial vibra con diferentes e intensos colores que lo dotan de extrema belleza.
Pero aún hay más por descubrir, pues sus paisajes lacustres y marinos aumentan su hermosura, a través de su vegetación tropical.
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Las playas de Ciudad del Carmen
La Plazuela Marín de Ciudad del Carmen data de 1854, el punto de encuentro entre amigos y paseos dominicales de las familias lugareñas.
Desde aquí se puede apreciar la fachada de la parroquia de la Virgen del Carmen, que desafortunadamente ha sufrido algunas modificaciones ocasionadas por desastres; incluso, se dice que la imagen fue rescatada de un incendio.
Para continuar su exploración ancestral, se puede visitar Xicalango, una zona arqueológica ubicada en la costa de la península de Atasta.
Se cree que era un importante puerto comercial para las culturas olmeca, maya y mexica. Una de las leyendas de este lugar cuenta que es la cuna de la famosa Malinche.
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Después de un arduo andar, qué mejor que relajar el cuerpo en alguna de las tranquilas áreas cerca del mar que ofrece Ciudad del Carmen,como la Playa Norte, con arenas blancas y oleaje tranquilo.
Una más es la Playa Caracol,que es bañada por la Laguna de Términos, rodeada de manglares.
Otra de las playas es Bahamita, que seduce por sus aguas cristalina de fina arena; su pequeña bahía está llena de restaurantes y palapas.
Para practicar pesca deportiva, buceo y natación está Puerto Real, que además cuenta con bancos de conchas y aguas que van de verde intenso a verde jade. Así de grande este hermoso destino.
