Hegra: la ciudad tallada en piedra abre sus puertas después de 2000 años

La sepultura más grande de este lugar es un monolito de 22 metros de alto, vestigios de una civilización casi olvidada

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Hegra abre sus puertas despúes de 2000 años
Tomasz Trześniowski/Flickr

¡Esto es realmente emocionante! Después de 2 mil años, finalmente los turistas y viajeros podrán experimentar el sitio arqueológico de Hegra, también conocido como la antigua ciudad de Mada’in Saleh, erigida al norte del desierto de Al-Ula, en Arabia Saudita; de acuerdo con sus estudiosos, fue un bcentro de comercio internacional.

Así que las autoridades sauditas han decidido promocionarla ante el mundo, como la hermana arqueológica de la ciudad de Petra, en Jordania, de tal manera que todos sus curiosos ahora pueden relacionar los patrones grabados sobre la superficie de piedra caliza con los elementos similares que decoran la ciudad jordana.

Esta iniciativa fue impulsada después de que el Gobierno de Arabia Saudita por primera vez otorgara visas de turismo en 2019. Razón de peso para abrir las puertas de las ciudades antiguas que son poco frecuentadas en la actualidad. El caso de Hegra es muy especial, pues son los vestigios de los nabateos, una civilización casi borrada por el paso del tiempo.

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Los misterios de Hegra

Esta ciudad cuenta con 111 tumbas en perfecto estado de conservación, entre las que destaca la sepultura de Lihyan —hijo de Kuza, a veces llamada Qasr al-Farid—, que es la más grande del sitio arqueológico con un monolito de 22 metros de alto.

En varias entrevistas, Lauren Ketihuno, uno de los más afamados expertos en África y Medio Oriente, explicó que Mada’in Saleh fue la segunda ciudad de este pueblo, así que podría ofrecer varias respuestas y revelar los secretos que ha mantenido en silencio este reino de la antigüedad.

La apuesta es que Hegra resulta un atractivo al ser casi desconocido para los extranjeros. Lo contrastante del asunto es que alrededor de un millón de turistas visitan Petra al año, razón para ser declarada por la Unesco como Patrimonio Mundial en Peligro de Extinción, en caso de no recibir el mantenimiento necesario.